El año 1991 fue atípico en la historia del rock. Una catarata de álbumes que parecía interminable cayó de repente y cada uno tenía la intención de ser insuperable en términos de impacto, calidad y sobre todo de trascendencia.
Mientras el grunge y el thrash experimentaban su apogeo y la onda alternativa empezaba a formalizarse dentro de la industria musical, el 17 de septiembre el público encontró en las disquerías un recorte de “La escuela de Atenas”, una de las pinturas más destacadas y conocidas del artista y arquitecto italiano Rafael Sanzio, que representa la filosofía a través de una sesión de pensadores clásicos.
La imagen fue tomada por el diseñador estonio-americano Mark Kostabi, sobreexpuesta en colores amarillo y azul y exhibida en forma de portadas. En un par de horas, más de 500 mil personas tendrían en su poder cuatro nuevas piezas artísticas: dos fragmentos modificados de aquella obra renacentista y dos discos llamados Use Your Illusion I y II.
El momento para los Guns N’ Roses era perfecto: se habían convertido en la mejor banda de rock del planeta. Este título no les era ajeno desde Appetite for Destruction, un álbum cuyo éxito era predecible teniendo en cuenta el origen y experiencia de los angelinos en sus proyectos primarios. Ese antecedente y el casi EP G N’ R Lies generó una expectativa altísima sobre su siguiente paso, el cual darían formalmente cuatro meses antes del lanzamiento del disco doble, con una de las giras mundiales más largas del rock empezando el 24 de mayo de 1991 y finalizando el 17 de julio de 1993.