El presidente y el gobernador se limitaron a darse la mano y saludarse, sin efusividad ni simpatía.
El saludo entre el gobernador Sergio Ziliotto y el presidente Javier Milei, este jueves en el Salón Eva Perón, fue protocolar y severo.
Muy en el estilo del jefe del Ejecutivo pampeano, Ziliotto tendió la mano y dio las buenas tardes. Milei respondió en el mismo estilo, en un contacto que apenas si duró un segundo.
Ziliotto fue uno de los primeros en ser saludado por Milei por el lugar de la mesa en que se encontraba.
Antes pasaron el santiagueño Gerardo Zamora, el santacruceño Claudio Vidal y el rionegrino Alberto Weretilneck, entre otros.
Ziliotto, de traje azul, tendió la mano derecha sin más gestos. Milei respondió con uno de sus rictus habituales: esa pequeña sonrisa nerviosa, y siguió prontamente su camino.
Mucho más efusivo estuvo el presidente en los contactos siguientes: abrazo con el entrerriano Rogelio Frigerio, contacto ameno con el cordobés Martín Llaryora, mano en puño y beso con el chubutense Ignacio "Nacho" Torres.



